En la obra La Zapatera Prodigiosa, Federico García Lorca en la obra tres hay mucha tensión dramática. Esta tensión dramática se da a conocer por la discusión que tiene la Zapatera con su querido esposo el Zapatero. La Zapatera y el Zapatero no son felices debido a la diferencia de edad, y esto trae muchas peleas, discusiones, gritos entre ellos, y también no se comprenden.
De acuerdo a la Zapatera y el Zapatero se ven alimentados por las malas intenciones que tienen las vecinas que se encargan que haya mas escándalo y se encargan de echarle más leña al fuego. Esta tensión dramática se ve en aumento, cuando sigue la obra se ve cada vez mas y mas.
Podemos observar mucha más conflictividad con las acotaciones, por ejemplo (sale corriendo por la calle), (Golpea furiosamente un zapato con un martillo), (se golpea la frente) y ahí muchas otras más.
También el autor se ha valido con algunas figuras literarias como por ejemplo cuando el Zapatero dice " valgate dios" eso es exclamación, también cuando dice la Zapatera "ahí dinero dinero"" eso se llama reduplicación, cuando dice el zapatero " a mí no me importa nada de nada" eso es hipérbole, también cuando dice el Zapatero "Mujer.. ¿Qué estás diciendo?” eso es interrogación, y una última mas cuando dice la Zapatera “Maldita hora maldita hora” eso como ya sabemos es repetición.
Esta tensión dramática ha sido muy bien manejado por el escritor ya que la a desarrollado gradualmente. El autor lleva poco a poco a los lectores o espectadores de la obra a compartir el conflicto que viven la Zapera y el Zapatero incluyendo a las vecinas.
Toda esta tensión dramática sin embargo debe entenderse en contexto de lo que la obra es: una comedia; Federico García Lorca para crear este conflicto se ha valido por dos personajes bien pensados, como lo son una joven y un viejo recién casados, que quienes constantemente discuten y nunca se comprenden. A esto se suma el mal eficio de las vecinas, quienes contribuyen a crear un ambienté ostÍl a lo largo del acto primero.
La escena tres alcanza un clímax al final cuando la zapatera se acusa a si misma de ser tonta y maldice a sus vecinos. La zapatera llega a un estado emotivo tan fuerte que lamenta mucho su suerte, se insulta a sí misma y maldice a sus vecinos " Yo me he rebajado, tonta, tonta, tonta! Maldito sea mi compadre Manuel, malditos sean los vecinos”.
Palabras: 415
Geovanna Rivera 8"E"
